Cuando la gente habla sobre la realidad virtual normalmente tiene unas ideas, que si bien algunas eran ciertas hace tiempo, hoy en día ya no lo son.
Aquí tienes mi opinión de las afirmaciones que se suelen escuchar sobre la realidad virtual. Aunque como siempre deberíamos hacer, no hay que tomar todo como blanco o negro y debemos intentar sacar nuestras propias conclusiones.
Las Gafas de Realidad Virtual son muy Caras
Esta es una de las frases más escuchadas y podríamos decir que al principio tenían razón, ya que los primeros dispositivos de realidad virtual eran bastante caros para lo que ofrecían. Pero con el paso del tiempo, cada vez hay más (y mejores) gafas VR en el mercado, cada una con sus propias características y precio.
Por ejemplo, una de las mejores gafas de realidad virtual que hay en la actualidad son las Oculus Quest 2. Este modelo creado por Oculus con un precio de salida de 349€ se tratan de unas gafas VR autónomas, es decir, no necesitan un PC para funcionar aunque se puede conectar a uno para conseguir más potencia. También cuentan con una buena resolución dentro de los estándares VR y con la posibilidad de jugar a los juegos exclusivos de Oculus, con un precio de salida de 349€ en su modelo de 64Gb.
Obviamente este ejemplo es uno de los más extremos ya que se trata de uno de los últimos modelos lanzados al mercado, ofreciendo una gran calidad por poco precio. Pero no tiene por qué ser el único, por ejemplo las PSVR son unas gafas más que decentes que se pueden utilizar con PS4 y PS5 las cuales cuestan alrededor de 200€. Por lo que al final el precio de unas gafas VR es prácticamente como el de una consola, dándonos la posibilidad de jugar a otros juegos que no podríamos disfrutar al no tenerlas.
Así que la afirmación de que las gafas de realidad virtual son caras solo se aplica si buscamos las mejores prestaciones y calidades (tal cual sucede en prácticamente todo), como por ejemplo sucede con las Valve Index, la cual para disfrutarla al 100% debemos gastarnos sobre 1000€. Pero como comentaba, el mercado sigue evolucionando y ofreciendo nuevas opciones con mejores prestaciones a un precio más económico.

Si quieres conocer más sobre las gafas VR, aquí tienes una selección de las gafas de realidad virtual más relevantes del mercado para escoger la que mejor se adecúe a tus necesidades.
No son inmersivas
Mucha gente también afirma que las gafas de realidad no son tan inmersivas, que simplemente es como acercarte una pantalla a escasos centímetros de los ojos.
Casualmente esta idea también tiene cierta relación con la primera afirmación de que la VR es muy cara, ya que la gente que dice esto la única vez que han experimentado un juego de realidad virtual es a través de la típica Cardboard VR como la de Google o utilizando unas gafas VR para móvil, debido a que son extremadamente económicas y por poco dinero prueban «esa» realidad virtual. Tras probarlas piensan que se ve idéntico a las gafas VR para PC, pero para nada, no tienen nada que ver, ya sea desde la resolución hasta el FOV.

Una vez aumentamos el presupuesto para comprar unas gafas VR para PC o simplemente con unas PSVR, la diferencia de calidad de imagen y con ella la inmersión es simplemente abismal respecto a la VR móvil. Siempre que acompañemos a las gafas con un PC que pueda mover los juegos con soltura, podremos disfrutar de unos gráficos increíbles en los que conforme vamos jugando, nos iremos metiendo más y más en el mundo virtual diseñado por los desarrolladores.
Por otro lado, y sin resumirlo todo a una experiencia de poca calidad con un visor económico, al fin y al cabo la realidad virtual lo que trata de conseguir es engañar al cerebro haciéndole creer que está físicamente en un lugar ficticio o virtual en este caso.
Debido a esto, hay juegos que no están muy bien trabajados y no consiguen transportarte a su mundo, ya no hablando solo gráficamente, ya que también entra en juego el apartado sonoro para lograr una buena inmersión. Por eso, si alguien solamente ha experimentado un par de juegos y estos eran de poca calidad, es normal que afirme que las gafas de realidad virtual no son inmersivas.
Si pese a haber probado un juego «triple A» de realidad virtual como por ejemplo Half-Life Alyx, con un visor VR de buena calidad alguien sigue pensando que no son inmersivas, le invito a que se espere un tiempo y deje que la tecnología siga avanzando para que vea lo que es capaz de ofrecer en el futuro.
Necesitas un PC de la NASA
Ya que acabo de mencionar lo de las especificaciones del PC en el punto anterior, es otra idea que hay sobre las gafas VR. Mucha gente afirma que necesitas un PC con el último procesador i7, la última gráfica del mercado (aunque mejor utilizar dos en SLI) 256GB de RAM y que también te sirva el café.
No, no hace falta que el PC tenga un procesador de última generación y las mejores prestaciones. Principalmente lo que se necesita para disfrutar de la realidad virtual a una calidad decente (en gráficos y en fps) es una tarjeta gráfica potente.
¿Pero qué entendemos por una tarjeta gráfica potente? Hace unos años, esa potencia se encontraba en una 970 GTX por ejemplo, una de las tarjetas más vendidas de la generación Maxwell. Pero obviamente ya le pesan un poco los años y la tecnología ya ofrece mejores gráficas a un menor precio.
Poniendo de ejemplo las nuevas tarjetas gráficas de NVIDIA, las series 3000 doblan en potencia a sus antecesoras y todo a un precio más económico. Así que ahí tenemos las nuevas tarjetas gráficas perfectamente diseñadas (con la vr en mente también) para disfrutar de la realidad virtual durante bastante tiempo.
Las tarjetas gráficas siguen mejorando con el paso del tiempo. Contra más tiempo pase, menos dinero tendremos que invertir para poder disfrutar de la realidad virtual. No hay que olvidar que se trata de una tecnología muy joven.
Pero como siempre estoy dando un ejemplo extremo. Con una gráfica 2060, el modelo más económico de Nvidia de la última serie podremos jugar sin problemas a los juegos de realidad virtual. Retomando la GTX 970 que he mencionado antes, esta gráfica sigue dando guerra en juegos menos pesados siempre que la acompañemos de un procesador decente para que no haga cuello de botella.
Contra más presupuesto invirtamos en el ordenador mayor calidad gráfica podremos conseguir, pero esto sucede tanto en los juegos VR como en los de toda la vida. Si para mantener una tasa de refresco constante hay que bajar las sombras al medio, pues se hace… Salvo que te fijes a propósito apenas notarás alguna diferencia y a cambio no necesitarás un comprar los mejores componentes de PC para utilizar unas gafas de realidad virtual.
Aunque he hecho bastante hincapié en la tarjeta gráfica ya que es uno de los puntos más importantes para la VR, siempre es necesario tener un PC equilibrado en sus principales componentes: procesador, tarjeta gráfica y RAM.
Usar Gafas VR Daña la Vista
«Tienes una pantalla a escasos centímetros, así que tiene que afectar mucho a la vista». Todos sabemos que pasar muchas horas delante de una pantalla no es muy bueno para la salud ocular y con la realidad virtual no iba a ser menos, por lo que es recomendable hacer descansos. Pero paradójicamente, al utilizar unas gafas de realidad virtual estamos forzando menos la vista que mirando la pantalla del monitor o del móvil.
Cuando miramos una pantalla estamos centrando la vista en un punto fijo (normalmente a unos 50 cm de distancia), pero dentro de la realidad virtual ese punto que fijamos se encuentra a 1-2 metros de distancia. La distancia de este punto de enfoque es mucho más cercana a la de nuestro día a día (la cual se sitúa en unos 6 metros).
Así que en conclusión, sí, la VR daña la vista como toda pantalla al no dejar descansar el ojo cambiando la distancia de enfoque, pero no es más mala que ver una pantalla de un móvil.
Además, si en el futuro se logran crear unas gafas de realidad virtual varifocales, será como si estuvieramos viendo en la vida real, pudiendo enfocar la vista en distintos puntos de los escenarios y logrando evitar la fatiga visual.
Lo que si hay que evitar es que personas menores a 13 años utilicen esta tecnología durante largos períodos de tiempo porque no se sabe como puede afectar al desarrollo de su vista a largo plazo.
No hay juegos de Realidad Virtual
Con el nacimiento de una nueva plataforma siempre saltan estos comentarios, ya sucedió hace unos años con la salida de Playstation 3 y 4, por ejemplo… pasa el tiempo y apenas salen nuevos juegos. Pues esta misma historia sucedió con la realidad virtual, una plataforma nueva y en este caso, innovadora. Debido a esto los primeros juegos VR eran extremadamente simples, desde la jugabilidad hasta los gráficos pasando por una duración bastante corta y una calidad cuestionable.
Pero como todo, con paciencia y con el paso del tiempo, los estudios fueron desarrollando más y mejores juegos para realidad virtual con la experiencia que iban ganando tras trabajar en esta nueva plataforma. Si ahora mismo echamos un ojo en la tienda de Steam y filtramos la búsqueda para que solo muestre los juegos solo para VR, encontramos más de 3500 títulos disponibles, una cifra que poco a poco va aumentando.

Los precios de los juegos de realidad virtual no son tan caros, pero gracias a un servicio como Viveport Infinity por ejemplo, podemos disfrutar de una gran lista de juegos VR a través de una suscripción mensual.
La pescadilla que se muerde la cola
Por otro lado, mirándolo objetivamente, la gran mayoría de juegos VR están creados por estudios pequeños o independientes, pero esto también tiene una explicación y es que «no hay una comunidad muy grande».
Aunque en principio cada vez hay más usuarios que poseen unas gafas de realidad virtual y disfrutan de todas sus posibilidades, todavía se trata de una base de jugadores bastante pequeña comparada con las consolas de sobremesa o PC.
Aquí entra el juego el ciclo interminable, la pescadilla que se muerde la cola. Si la gente no compra unas gafas de realidad virtual, los estudios grandes no desarrollan juegos al estudiar el mercado y preveer que no van a recibir muchos beneficios trabajando en la plataforma, por lo que no salen nuevos juegos y no aumenta la base de jugadores al ver la escasa variedad de juegos de calidad disponibles.
Para romper este círculo vicioso se necesitaba que una empresa grande como Sony o Valve dieran un golpe sobre la mesa y apostaran por esta tecnología. Valve creando Half-Life Alyx ha creado uno de los primeros juegos «vendeconsolas» (un término que le gusta utilizar a mucha gente) que en este caso lo podríamos nombrar como «vendegafas».
Por otro lado, Sony ha ido por su propio camino centrándose en PSVR, para ofrecer la posibilidad de disfrutar de la realidad virtual a un precio más económico a la vez que la apoyaba desarrollando juegos exclusivos de alta calidad como Blood and Truth y Astrobot: Rescue Mission.

¿Cual es la solución? La solución es bien sencilla, se necesitan más usuarios con gafas VR y en principio la base seguirá creciendo gracias a los nuevos modelos más potentes y económicos. Poro otro lado los estudios deben apostar por desarrollar contenido para la realidad virtual. Pero como comentábamos, más que una decisión racional (para ambas partes) se convierte en un acto de fe. Pero cualquiera que sueñe un poco con las posibilidades de esta tecnología en el futuro, sabe que es una plataforma a la que hay que apoyar ahora para (intentar) lograr que esos sueños se hagan realidad.